No me mates...

Con los ojos llorosos, cogí el calendario nuevamente. No me lo creía aún, cinco meses...Dejé que la lagrima resbalara por mi mejilla, total estaba encerrada en mi habitación, y hoy era un día demaciado triste como para preocuparse por ponerme la mascara de "Todo está bien." Las lagrimas se fueron duplicando. Tiré el calendario contra la ventana, lo quería lo más lejos posible. El calendario rebotó contra la pared, y cayó al suelo. Me dió una profunda rabia y tristeza.Sollozé fuertemente. Era demaciado triste amar descomunalmente a alguien y que él te hiciera ese tipo de cosas. Todo me pasa por no haber seguido mi promesa. Lucas se había olvidado de mí, y de todo lo que tenía que ver conmigo, y yo, cinco meses después, y lo sentía como una eternidad. Lucas había sido el ser mas perfecto en mi vida. Lo extrañaba demaciado, y saber que hoy eran cinco meses desde que ya no estabamos juntos me partía el corazón, y el agujero negro se estaba apoderando de mí. Y el estado automatico era inutil en estos momentos. Ya no podía seguir más ocultando y pretendiendo que todo estaba bien, aunque mi mundo se me venía encima.

Sentí como tocaban la puerta. Pero hice caso omiso, y ni me exforsé por no hacer ruido.
- Mel, abreme por favor...-pidió la voz de mi padre preocupada y triste.
- Ahora no papá.-pedí con voz entrecortada

Segundos más tarde, tocaron otra vez.

- Abre Mel, por favor. -esa era lo preocupada voz de mi hermano.
No respondí. Temía su reacción.
- Maldita sea! no sabes lo que me hace sentir el oirte llorar desconzoladamente al otro lado de la puerta, sin poder entrar, sin saber nada, sin ayudarte y sin poder consolarte.

Me dió pesar, y le agradecí a la vida por haberme regalado el mejor hermano de todos. Respiré varias veces para responder:

- Todo está bien, Rob. No pasa nada. -mi voz se fué apagando, pero supe que había escuchado. En la puerta se oyó un horrible golpe. Me sobresalté.
- Mierda Melanie, los dos sabemos que no es asi. Abre de una maldita vez!

Cada vez que yo lloraba, mi hermano se frustraba y se enojaba. Las lagrimas no parecían querer dejar de salir nunca. Supe que mi hermano seguía parado en la puerta, porque debajo de esta se veía su sombra.

- Por favor...-lo oí pedirme. Se oía triste, y no podía soportar que se sintiera así por mi culpa.
Me levanté de la cama, y arrastré mis piernas hacia la puerta. La abrí, y antes de poder moverme un centimetro, Rob se avalanzó sobre mí. Cerró la puerta con pasador y me llevó a la cama.

Me senté a su lado y lo abrazé sin decir una palabra. Me devolvió el abrazo, y se acostó en la cama. Me recosté en su hombro y lloré. Rob solo me daba besos, o me apretaba más, o jugaba con mi cabello.
Traté de calmarme varias veces. Cuando lo hice, Rob habló.
- Qué es lo que te pasa? -preguntó dulcemente.
- Rob...Esque hace...5 meses...Hoy...Lucas y yo...-no logré decir nada coherente, sin echarme a llorar. Rob asintió y me abrazó nuevamente, haciendome sentir protegida.

Lo siguiente que oí fue mi movil. Me removí lentamente y parpadée varias veces. Me estiré lo más posible hasta alcanzar mi movil, sin llegar a despertar a mi hermano, que dormía profundamente abrazandome.
Miré el identificador, era Kam.Yo: Hola, Kam. -susurré. Kam: Ayudame! -chilló.
Yo: Que sucede?! -pregunté algo preocupada.
Kam: No sé donde estoy....Mel!! -pidió con miedo
Yo: Donde estas?! -pregunté preocupada.
Kam: No...no sé!......Mi auto se descompuso...y..-dudó- unos tipos me siguieron, y ahora estoy en frente de un bar!
Yo: y como se llama? -pregunté
Kam: No lo sé!
Yo: Entra y pregunta...
Kam: Mel, la camarera....Se llama....mmm...Brettany. -dijo. Claro! El bar al que papá me había llevado! La camarera!! Tambien se llamaba Brettany. A pesar de todas las Brettanys que podian existir, mi instinto me dijo que era ahí.
Yo: Creo que sé dónde esstas. No te muevas, ya salgo.
Corté, y me puse un poco de maquillaje, para difuminar mis horribles ojeras. Cogí las llaves del auto y bajé corriendo.
- Para donde vas? -preguntó mi padre.
- Kam está perdida en un bar...Y creo que sé dónde es. Iré por ella. -le dije saliendo. Una sonrisa se asomó por sus labios, mi padre era extraño.
- Entonces, Suerte. -me deseó y salí corriendo.
Durante todo el camino estube llamando a Kam, que no contestaba. Me preocupaba pensar que algo le había pasado.
Al llegar al bar, salí corriendo, y al no verla, la llamé nuevamente. Tampoco contestó, y empecé con mi pesimismo. Entré, no se veía nada. Acomodé mi vista, pero no ví a ningún camarero. Lentamente, las luces se fueron encendiendo.
- Hola a todo el mundo. -reconocí esa voz sin siquiera mirar la tarima. Se oía algo triste.- Hoy...Hoy es un día especial, pero no en un buen sentido. Antes sí lo era...Pero eso cambió. Y por eso el lugar está decorado de esta manera aunque no sea san valentín...Pero creo que solo esto lo entenderá una persona.- pasó su mirada por todas las chicas. Sus ojos se detuvieron en mi, y un brillo especial surgió de ellos. Traté de taparme con mi cabello, pero lo único que logré fué sacarle una sonrisa.
>> Y sé que estas aqui, porque ya te vi. -Miré a Lucas, solo para advertir que evidentemente era a mi a quien hablaba. Me estaba lanzando una de esas miradas profundas suyas, y yo lo unico que hacia era estar ahí parada como una idota. - Y sí, todo esto lo hice por tí, porque nunca me olvidé de ti, porque este día es duro para ti como lo es para mi, porque quiero que me perdones...Y porque Te Amo. Esto es para ti.
Con su guitarra empezó a tocar unas notas. Las reconocí inmediatamente, era la canción que habia compuesto para mi, y me había mostrado hace un tiempo. Empezó tambien a cantar. Lo miré, y me sostubo la mirada.
Todas las chicas en el lugar no hacían más que mirarme, o mirarlo con cara de enamoradas idiotas.

- Celosa de las fans? -una voz me susurró al lado. Me giré y reconcí a Brettany. Le sonreí con pena, y ella me señaló una mesa.
- Está apartada...Para tí. -sonrió.
- Como lo sabes..?
- Pues, digamos que Lucas es mi amigo, y también soy una entrometida. -rió, y se sentó a mi lado, mirando a Lucas.- Tiene demaciadas admiradoras...-dijo suspirando- Pero él ni las notas. Sólo le importas tú. Eres de lo único que habla.
- Enserio? -pregunté sorprendida.
- Te ama más que a cualquier cosa en este y otros mundos! -casi me gritó- Y te extraña como un loco...Lo que daría yo por un chico asi...

Miré a Lucas, que para ese momento terminaba la hermosa canción.
- Te amo. -dijo mirandome- Y soy una mierda, perdoname....Esta canción, no es mía, pero tambien va dedicada a tí.

Empezó la introducción de lo que sería una versión acustica de "Here without you." de Three Days Grace.
La canción me aguó. Pude ver la tristeza en sus ojos, pude ver que tambien quería llorar. Entre todos los aplausos, suspiros y griticos de las chicas, escuché toda la canción.

- Todo esto es por ti. Yo sé que te duele estar así, pero a mi me mata. Tambien sé que es todo por mi culpa, y que....Bueno, te engañé, y no lo esperabas...Pero tienes que saber, que te amo, y que nunca quize que esto pasara, porque eres y has sido desde que te conocí lo único que me importa, y lo único que quiero en verdad. Y tambien sé que no te gusta ser el centro de atención, pero eres MI centro de atención, y por una vez en la vida quiero que lo demás lo sepan...Perdoname por favor, en realidad no sé como hacer esto...

- No. -interrumpí con voz baja, pero él se calló. Negué varias veces con la cabeza, al tiempo que me paraba lentamente de la mesa y me acercaba a la salida.

Oí como todas las demás personas murmuraban cosas en voz baja. Las ignoré y salí del lugar, mientras mis ojos se empañaban con lagrimas.

- Por favor no me dejes solo. -oí su triste voz, que venía de algún lugar detrás mío. No sé por qué lo hice, pero me detuve. No me giré, no dije nada. Solo me detuve.

Lucas recorrió la distancia que nos separaba y se hiso delate de mí. Bajé la vista al sentir sus ojos en mi rostro. Nadie dijo nada.

Luego de unos segundos, Lucas tomó mi mentón y alsó mi cabeza, de manera que quedara mirándolo, dejé que sostuviera mi cabeza delicadamente, y le miré. Rapidamente, su mano soltó mi mentón, y pasó a acariciarme la mejilla. Con la otra mano, me extendió una hermosa rosa negra que no supe de dónde la saco...Era...Negra. ¿Existen las rosas negras?
Quitó la mano de mi mejilla y con ella tomó, muy delicadamente, mi mano. Puso la rosa en ella, y apretó suabemente su mano, haciendome apretar la rosa. Todo lo hiso sin apartar los ojos de los míos. Bajé la mirada y observe la rosa, rodeada de nuestras manos, no me había soltado. Su mano estaba muy caliente a comparación de la mía, que estaba helada.

Subí nuevamente la mirada, no se había movido ni un solo centimetro. Vi como trataba de decír algo, sin exito. Nada salía de su boca, y mucho menos de la mía.
Despues de un rato, sin que yo supiera qué hacer, su mirada se intensificó un poco más, si es que era posible. Y finalmente dijo:

- Te quiero...Más que a nadie.

En sus ojos pude ver la sinceridad de esas palabras. Me dieron ganas de lanzarme encima suyo, y gritarle cuanto lo amo, besarlo y decirle que olvidaramos todo. Pero no supe cual sería su reacción, además...Él me había engañado. En ese momento recordé todos los besos de él con Abby...Me sentí mal. Y él pareció notarlo, su mandivula se tensó, y su expresión se volvió más seria.

- Tu me quieres? -preguntó con cierto tono de tristeza.
- Eso lo sabes...-respondí en un hilo de voz. Mis ojos volvieron a llenarse de lágrimas.
- No. Lo sabía. -corrigió.- Pero pudo haber cambiado, y tengo que saberlo.
- Para qué, Lucas? -pregunté y se me cortó la voz.
- Porque yo si te quiero. Quiero saber si me correspondes, o si te olvidaste de lo nuestro...Para ver si aún tengo oportunidades...Además, tengo esperanza. -sonrió tristemente.
- En ese caso...-suspiré profundamente- Mis sentimientos por ti no han cambiado.

- Entonces...Por qué no me perdonas? -preguntó- Por qué no...Lo intentamos nuevamente? Cual es el maldito problema?-preguntó, con un tono de rabia, pero tambien alivo a la misma vez.
- Solo....Solo pido tiempo...-susurré.
- tiempo?! Cinco meses completos y pides tiempo?....Por favor, no me pidas tiempo. -terminó con un tono triste de suplica.
- Me engañaste. -susurré.
- Vamos...-me tomó de las manos- Sabes que te amo.
- Pero no sé si tambien la amas a ella.
- A Abby?! A esa? -preguntó con rabia- Quien podria amarla?! Es ella quien me persigue, y que no me deja en paz...
- Te vi besarla. Muchas veces.
- Para darte celos! Todo era parte de un plan...Pero ahora...Le dejé todo claro...Me la quité de encima. -no pude evitar sonreir con eso último que dijo, él me devolvió la sonrisa. Se veía triste apesar de sonreir.


- Tienes que entenderlo. -le supliqué. Me miró con una profunda tristeza.- Es la primera vez que me pasa...Confiaba ciegamente en tí...No me pidas que olvides lo que me hiciste.
- Y no me pidas tú que me olvide de ti! -me gritó con rabia. Me quedé callada, viendo como sus ojos se llenaban de lágrimas, igual que los míos.

- Abby nunca fue algo importante para mi. Yo te amo a ti, a ti Melanie. No me importa si me viste besar a Abby, tienes que creerme...Además, no me digas que tu y Collin no...Collin no es acaso tu novio?
- Collin no es mi novio, no es nada mio.
- Ah no? -preguntó con tono sarcastico.
- Estas celoso! -afirmé. Sus ojos brillaron y me dedicó una media sonrisa torcida...Perfecta.
-Lo estoy. -confirmó.
- Mira Lucas...-tomé aire- Collin no es nada mío. Y si lo fuese, tu no tendrias por qué meterte. Tu y yo no somos nada...-me dolía decirle eso, y muchisimo más cuando sus ojos se llenaban de lágrimas. Los míos soltaron una lágrima, que me sequé rapidamente.- Lo nuestro se acabó. Por más que me duela creerlo, decirlo, aceptarlo...Y sí, no te he olvidado, sigo soñando contigo, te amo, quizá más de lo que te amaba antes, aunque no estoy segura de que sea posible...Y tambien sé que muy probablemente jamás te olvidaré, porque eres el amor de mi vida.
- Pero tú y yo...-interrumpió con las lágrimas al borde de los ojos.
- Tú y yo qué? -repetí con otra lágrima rodando por mi mejilla.
- Tú y yo nos amamos....-susurró.
- Cómo puedes decir que amas a alguien que casi no conoces? llebamos menos tiempo siendo novios que no siendolo. Me conosciste por tres meses.
- Y lo hise tan bien, que puedo afirmar que te amo....No sabes cuanto he sufrido sin ti....Cuanto te extraño...

Negué con la cabeza.
- Lo siento...-susurré. Una lágrima rodó por mi mejilla, seguida de otra. Lucas dió un paso hacia mí.

- Te amo. -dijo cogiendo mi cabeza en sus manos, y apretando los ojos. Una lágrima recorrió su mejilla, tambien fue seguida por otra. Ambos llorabamos.- Por favor no me digas que te perdí...-derramó otra lágrima- No me mates.

Lo miré, se veía tan triste...Me miró con su mirada profunda, solo que con lágrimas, como nunca antes lo había visto.
Pasé mis manos alrededor de su cuello y lo besé.

Lo besé apacionadamente como nunca antes lo había echo. Como si fuera nuestro último beso en la vida. Sus brazos rodearon mi cintura y empujaron de mi espalda para acercarme mas a él. Puse mis manos en sus mojadas mejillas y lo acerqué mas a mi. No lo quise soltar, nos besamos por mas de 5 minutos. Y lentamente nos fuimos separando.

Me sonrió mientras le sequé las lágrimas. Luego puse mi cabeza contra su pecho, aspiré su tan extrañado olor...Y lloré.

- No sabes cuanto te he extrañado...-le dije llorando.
- Jamás nos volveremos a separar. -aseguró.- Te amo.

Sonreí. Él me separó de su pecho y me cogió el mentón.
- Te amo. -le dije.
- Te amo. -repitió secando una lagrima que recorria mi mejilla.
- Arruiné tu camisa..Como lo siento...-me empezé a disculpar. Pero me calló con un beso.

Se lo devolví. Lucas dejó de besarme y me sonrió. Luego pasó a besarme todas las partes de mi cuerpo. Las orejas, los ojos, la frente, el cueyo, las mejillas, el cabello, las manos los brazos....

Le sonreí y lo volví a abrazar.
- Eres toda mía? -preguntó con malicia y media sonrisa.
- Toda tuya. -afirmé cogiendolo de la mano.

Me besó nuevamente.
- Tengo que contarte tantas cosas...-le dije.
- Puedes empezar...-sugirió
- Bueno. -sonreí y le di un corto beso. No pude resistirme.- Dejé de vivir con Nicolle! Y ahora estoy viviendo con mi padre, la persona más maravillosa del mundo!
- Y te ama. -afirmó.- Pues....Hablé con él. -dijo despues de mi mirada confundida.
- Enserio?
- De hecho, él sabía todo lo de hoy....Vaya que no fue facil...Pero valió la pena. -dijo besando mi coronilla.- Te amo.
- Te amo!

No se pueden describir con palabras todas las emociones y pensamientos que pasaban por mi cabeza en ese instante. Creo que haría un colapso.

Pero estaba junto al ser más perfecto de la historia. Nada malo podria pasarme junto a él. Sonreí.

Era la persona mas feliz en todo el mundo. Ahora estaba junto a él, nada podria separarnos.
- Que piensas? -me preguntó al oido.
- Nada va a separarnos, verdad?
- Nada. Jamás. Porque te amo, y haré lo que sea para estar contigo.
- Lucas....Eres perfecto! -rió.
- Perfecta eres tú. A veces creo que no te meresco...
- Lucas, no mientas, además, no me importa...Sólo te quiero a ti.
- Y....Tambien hablé con Rob...-me dijo.
- Ah sí?
- Si...Y en este momento debe estar dónde Kam....Me preocupa tu amiga.
- Lo sé. A veces me dan ganas de ir y matar a Ethan....Pero lo irónico es que Kam hiso con Rob lo mismo que hiciste conmigo, y yo actué como Ethan...En cierto modo, lo entiendo.
- No sé...Pero a mi si me dan ganas de ir y partirle la cara.

- A dónde vamos? -pregunté cuando caí en cuenta.
- Volvemos al bar, porque tu padre...Me pidió que si nos reconciliabamos fueramos a cenar a tu casa, de todos modos él prepararía la cena.
- Ya...Mi carro está cerca. -Me miró y me sonrió tiernamente.

De camino al carro, me agarró de la cintura y me atrajo a él. No sé qué hiso, pero seguimos caminando. Me dió varios besos en la coronilla y repitió mil veces "Te amo".

Me abrió la puerta de copiloto, y me senté sin protestar....